El JF-17 el candidato que ofrece China para sustituir los Mirages en Argentina
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@osky1963 Lo anticipado el este foro, se activan los alcahuetes célebres
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@osky1963 dijo en El JF-17 el candidato que ofrece China para sustituir los Mirages en Argentina:
@pisciano dijo en El JF-17 el candidato que ofrece China para sustituir los Mirages en Argentina:
Andrei Serbin Pont* y Juan Battaleme**
Hoy 02:29Aviones de combate y competencia bipolar
Argentina estudia la posibilidad de adquirir aviones de combate, una decisión con un gran impacto en su posicionamiento frente al mundo. Dos opciones muy diferentes entre sí son las que se están barajando.
OPCIONES. La versión danesa de los F-16 de Estados Unidos y el sino-paquistaní JF-17B-Block III, que sería versionado para evitar el veto de Londres.
En el artículo publicado en la revista Proceedings del Instituto Naval de los Estados Unidos (USNI), del mes de agosto, el capitán de navío Frank Okata realiza un acertado diagnóstico sobre la particular situación de la República Argentina en el Atlántico sur, en el contexto de la rivalidad creciente entre EE.UU. y China. Independientemente de la excelente relación que EE.UU. tiene con Brasil y Chile, es una voz más que plantea con preocupación la relación que nuestro país tiene con China en el campo de la seguridad, y sus implicancias para la seguridad hemisférica.
Aunque se pueda argumentar que la relación sigue siendo “mucho ruido y pocas nueces”, hay condiciones que justifican la mirada del oficial naval: se ha permitido una instalación espacial de rastreo satelital, además de firmar una serie de acuerdos en el marco de la ruta de la seda, y se ha recibido equipamiento menor proveniente de ese país y ahora se suma un creciente interés por adquirir aviones de combate producidos por un consorcio sino-paquistaní conocido como JF-17 que, para ser justos, es parte de un paquete variado de competidores que tienen aviones de EE.UU. como el F-16, el Tejas de India (coproducido con EE.UU., Inglaterra e Israel), Francia y los Mirage 2000 e Italia con el Aermacchi M-346.
En EE.UU. preocupa la relación de nuestro país con China en el campo de la seguridad y sus implicancias hemisféricas
Existen dos antecedentes al artículo de Okata: uno en 2017, en el UK Defense Journal, titulado “Argentina have ceased to be a capable military force due to cuts” (“Argentina dejó de tener una fuerza capaz de combatir como consecuencia de los recortes presupuestarios”) y otro de 2019, de la publicación The National Interest, titulado “Trouble: Argentina’s Navy and Air Force are in danger” (“La Armada y la Fuerza Aérea de Argentina están en peligro”). Ambos ponen de manifiesto la capacidad de combate de las FF.AA. y su estado de preparación.Los argumentos presentados suelen disparar debates sobre el estado actual de la defensa. El problema es que quedan reducidos a áreas de nicho como son los think tanks, las universidades o espacios marginales como Twitter. Pocos llegan a producir un efecto determinado, en las áreas de toma de decisión. Toda la discusión se reduce a la escasez, a la discusión eterna de “armas o manteca”, que en estos páramos se presenta como dicotómica, de manera tal que se hace política de defensa en los márgenes, sin destinar los recursos necesarios, dando continuidad a un largo ciclo de decadencia que afecta todas las áreas del Estado. La excepción a esta situación podría ser el Fondo para la Defensa, pero debido a la proximidad temporal de este no hay condiciones para decir si es o no efectivo. En los papeles debería funcionar.
Al leer con detenimiento el artículo, podemos señalar que las estructuras decisionales en Washington parten de dos premisas. Primero, saben que el veto británico complica la relación con EE.UU., en particular en lo que hace a la provisión de sistemas relativamente sofisticados. Situación recurrente con administraciones que hacen de la cuestión Malvinas el centro de la relación bilateral con el Reino Unido, con una fuerte retórica y una inacción supina que brinda el argumento justo para sostener un esquema de sanciones que es retrógrado después de cuarenta años del conflicto, aunque considerado razonable desde la óptica de la rendición de cuentas de Londres. Para las audiencias locales, y de no mediar la Guerra de Ucrania o la tensión en el Indo-Pacífico, Rusia y China aparecen como socios atractivos: material “libre” de sanciones, que eventualmente puede transferir tecnología y con acuerdos
que a priori podrían relanzar aspectos específicos de la industria de defensa.
JF-17B-Block III (FOTO: AFP)Segundo, saben a la perfección que desde hace tiempo la política exterior y la de defensa es una de bajos recursos, que vive de pedir prestado y negociar deudas. No somos únicos, pero sí una rara avis en la política internacional: somos “los mangalorianos”. Frente a ello, una oferta que siga los lineamientos de bueno, bonito y barato cobra sentido, sobre todo frente a quienes hacen de su práctica política, académica y social una fuerte retórica antinorteamericana.
Las recurrentes aspiraciones por cambiar de zona de influencia, para ser autónomos e independientes, se vuelven una quimera ya que no consideran las realidades políticas y geográficas que dicho accionar supone, pero el argumento es atractivo, basado en una concepción de soberanía de principios del siglo XX.El capitán Okata es consciente de ello, de ahí su propuesta de contraponer la insistente oferta por parte de China de un producto sino-paquistaní (JF-17 Block III, versionado para evitar obstáculos del veto inglés) de calidad aceptable y participación mínima en el mercado internacional (pocos operadores, con armas de variada calidad, no probadas en combate) con una versión del F-16 A/B con capacidades limitadas. A priori la oferta no parece atractiva. Los F-16 daneses ofrecidos son de producción temprana, con cerca de cuatro décadas de servicio activo, y a pesar de consistentes modernizaciones, tienen una tecnología que a duras penas se puede considerar actualizada en 2022.
Pero al abrir la discusión se plantea lo más importante en una adquisición de sistemas de armas como el aéreo, con un doble propósito político y operacional: avanzar en el diálogo con el Reino Unido para sobreponer los obstáculos del veto, y proveer a la Fuerza Aérea Argentina de un sistema de armas que sirva como stop-gap operativo y puente hacia futuras capacidades avanzadas, sumándola a la grilla occidental. Un ejemplo de libro de texto de aquello que llamamos ganar-ganar.
Esto representa un reconocimiento expreso de que es necesario restaurar la confianza militar entre Argentina y el Reino Unido, y que EE.UU. está dispuesto nuevamente a ser garante de dicha acción, como cuando lo fue en la adquisición de los A-4AR, próximos a ser desprogramados.Recuperar la confianza lleva tiempo, pero este sería el camino para reintegrarnos funcionalmente a la matriz occidental que detentan todas las fuerzas militares de la región, justamente generando interdependencia. Este no es un dato menor de cara al futuro. Es un necesario primer paso, luego de la frustración ocasionada por la fallida compra de los KAI FA-50 Fighting Eagle a Corea del Sur, en parte por el veto británico (y la falta de interés de encarar este desafío con el fabricante y en diálogo con los ingleses) y la carencia de fondos efectivos para comprar otro avión de entrenamiento avanzado configurado como caza ligero.
Es necesario restaurar la confianza militar entre la Argentina y el Reino Unido, y Washington está dispuesto a ser garante
Comparativamente, el F-16 nació como avión de caza y ataque a tierra por derecho propio, no por ampliaciones funcionales. En los últimos cuarenta años se ha convertido en el caza multirrol más exitoso del mundo, con más de 3 mil aviones operativos en 25 países. Su proliferación y enorme demanda, tanto en versiones nuevas como en el mercado de segunda mano, es reflejo de la efectividad y eficiencia de esta plataforma para fuerzas aéreas de todo tipo que requieren sistemas de armas polivalentes, modernas y con un amplio horizonte operativo.Asimismo, Okata sabe que la adquisición de F-16 tiene un valor simbólico adicional ya que significa un compromiso en relación con el orden y la estabilidad en el Atlántico sur. Esto no es desestimar nuestro legítimo e irrenunciable reclamo sobre las islas Malvinas, Sandwich y Georgias del Sur, pero sí cumplir con lo establecido en la Constitución Nacional en cuanto a la vocación de recuperación pacífica. En el peor de los casos pone en blanco sobre negro una situación, deja vacío el argumento de que la culpa de nuestra falta de reequipamiento es del accionar anglonorteamericano.
Si optamos por el otro camino, comprar aviones de combate de una nación que además compite con EE.UU., estamos mandando una señal inequívoca: en un futuro podríamos transformar el mandato constitucional en algo condicional, ya que la incorporación de material militar de China se justificaría en la autonomía que brinda no integrar una cadena de valor occidental en caso de conflicto armado. Ciertamente, implica algún tipo de alineamiento alejándonos de la pretendida equidistancia entre ambos poderes. Ambos caminos son políticamente posibles, diferentes son las consecuencias.
Argentina apostaría a que China actuara como un socio militar vital, que además va a mantener una cadena de abastecimiento sólida para sustentar nuestras capacidades operativas. Considerando que la Directiva de Política de Defensa Nacional actual da prioridad a la defensa en el Atlántico sur como sistema integrado por el océano, las islas y la Antártida, la compra de aviones de combate chinos empeora el entorno de seguridad, ya que aumenta la dinámica de competencia futura y trae al Atlántico el dilema de seguridad que se da en el Pacífico.Mientras que un acuerdo por mantener una línea de provisión de material militar occidental “de oportunidad” mejora sustancialmente la seguridad del ámbito: integraríamos la grilla de naciones que promueven la paz y la seguridad en el Atlántico sur (operacional y políticamente) y ayudaría a tener una relación bilateral más amplia con el Reino Unido.
En materia de seguridad internacional, las compras de armas no son neutras ya que se considera que representan además una declaración política. Si bien esta situación no previene de que sean usadas en contra del proveedor, tiene la finalidad de afectar percepciones y posición de poder, señalando un compromiso en el campo de la política internacional.
La decisión de adquirir un avión de combate supone sensores, datos y además integración a un complejo militar industrial, tal como lo pone de manifiesto Stephen Brooks en su libro Producing Security: Multinational Corporations, Globalization and the Changing Calculus of Conflict (2005), demostrando cómo la integración de los complejos industriales militares generan más oportunidades de paz. La preparación en el campo de la defensa es acerca de la paz que deseamos mantener, bienvenidas las reflexiones como las de Okata, que ponen el eje donde debe ir: la dimensión internacional de la defensa.Analista internacional, director de Cries.
Politólogo, profesor de la Ucema/UBA.https://www.perfil.com/noticias/elobservador/aviones-de-combate-y-competencia-bipolar.phtml
Impecable análisis de la nota de Perfil hecha en el Facebook de
Fuerzas de Defensa Argentinas
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Bueno, ya comenzaron en medios argentinos las notas a favor de una eventual incorporación de los F-16 de segunda mano presumiblemente ex daneses que ofrece Estados Unidos.
Es interesante la nota pues los autores reconocen que "Los F-16 daneses ofrecidos son de producción temprana, con cerca de cuatro décadas de servicio activo, y a pesar de consistentes modernizaciones, tienen una tecnología que a duras penas se puede considerar actualizada en 2022".
Pero justifican su postura a favor del F-16 mencionando que la incorporación de un sistema de armas de estas características tiene connotaciones tanto estrictamente militares como de posicionamiento político (lo cual es completamente cierto) e indicando que la eventual incorporación de estas aeronaves sería una situación de win-win, ganancia para los Estados Unidos pues evitaría que la Argentina incorpore un caza de procedencia China (china-paquistaní para ser precisos) lo cual podría ser el inicio de una mayor cooperación militar de China con los paises de la región y ganancia para la Argentina, pues según los autores le permitiría a nuestro país "avanzar en el diálogo con el Reino Unido para sobreponer los obstáculos del veto, y proveer a la Fuerza Aérea Argentina de un sistema de armas que sirva como stop-gap operativo y puente hacia futuras capacidades avanzadas, sumándola a la grilla occidental".
Además los autores agregan que "Recuperar la confianza lleva tiempo, pero este sería el camino para reintegrarnos funcionalmente a la matriz occidental que detentan todas las fuerzas militares de la región".
Finalmente en el articulo se da a entender que una eventual adquisición del F-16 mandaría una señal inequívoca, primero de que la Argentina está comprometida con "el orden y estabilidad" del Atlántico Sur pues incorporaría una aeronave limitada que no representaría ninguna eventual amenaza para las fuerzas británicas destacadas en las Islas Malvinas y segundo de que la Argentina está alineada con los Estados Unidos.
Ante esto me permito hacer algunas observaciones:
1- Los autores están más preocupados por "Occidente" (o mejor dicho por lo que ellos entienden por Occidente) y por evitar un eventual aumento de la influencia China que por las reales necesidades del instrumento militar argentino.
2- Para los autores, Argentina en particular y América Latina en general se encuentran en una relación de subordinación que no se puede discutir, en todo caso la discusión es si esa subordinación debe ser hacia los Estados Unidos y sus intereses geoestratégicos o hacia China y los suyos, los autores parecen no contemplar la posibilidad de generar una política de defensa autónoma y equidistante de los intereses de ambas potencias, pues de nuevo parecen más preocupados por Occidente que por la Argentina.
3- Los autores parecen desconocer que en la Argentina debido a la falta de una política de estado en la materia los stop-gap ( vale decir las aeronaves incorporadas de manera transitoria como paso previo a la incorporación de nuevas aeronaves con capacidades mucho mayores) se vuelven permanentes, vivo ejemplo es el A-4AR, el cual en teoría era una preparación para la futura incorporación de F-16 y en su lugar ya lleva 25 años de servicio.
En otras palabras no hay ninguna garantía y de ninguna manera la incorporación de estos F-16 de segunda mano garantizan una futura incorporación de aeronaves de mayor capacidad.
4- La Argentina siempre a estado dispuesta al dialogo con el Reino Unido, es en todo caso el Reino Unido el que decidió cerrar cualquier tipo de posibilidad de dialogo entre ambas naciones en lo referente al diferendo de soberanía que ambas mantienen, es el Reino Unido el que desconoce los llamados de los organismos internacionales en la materia, es el Reino Unido el que mantiene una fuerza militar en las islas, es el el Reino Unido el que por un lado declama que la integridad territorial de las naciones es un principio inviolable del derecho internacional pero por el otro viola obscenamente la integridad territorial de la Argentina amparándose no en la historia y el derecho, sino en la fuerza, en suma haciendo lo que a otros les critica.
De modo que no se entiende el motivo por el cual los autores están tan interesados en que Argentina muestre dialogo con el Reino Unido y compromiso con la estabilidad y seguridad del Atlántico Sur cuando es dicha nación europea la que se niega a dialogar y mantiene posiciones intransigentes.
Para los autores no es suficiente que la Argentina haya manifestado que la recuperación de los territorios usurpados se hará únicamente por medios pacíficos, es necesario que lo demuestre con un acto de sumisión incorporando una aeronave previamente autorizada y aprobada por el Reino Unido.
5- Para los autores su real preocupación parece ser el enfrentamiento global entre Estados Unidos y China y como evitar que en ese contexto el pais asiático pueda hacer pie en una zona que históricamente estuvo bajo la influencia de los Estados Unidos como lo es América Latina.
En ese contexto los autores son honestos, no fingen neutralidad, para ellos indiscutiblemente hay que posicionarse del lado de Occidente y en ese sentido las verdaderas necesidades de la Argentina en materia de defensa y sus intereses estratégicos y políticos son de segundo orden, lo prioritario es que esta zona del mundo continúe alineada sin fisuras a los Estados Unidos y lejos de cualquier intento de penetración por parte de China.
Los autores nunca se preguntan cuales son las reales necesidades de la Fuerza Aérea Argentina, cuales son las aspiraciones y los objetivos políticos y estratégicos de nuestro país en particular en el área del Atlántico Sur y la Antártida o que beneficios concretos obtendría la Argentina de una eventual incorporación de estas aeronaves pues para ellos hay algo superior, más importante, que es Occidente.
Para Estados Unidos Occidente es el AUKUS, la Unión Europea, Japón, Corea del Sur e Israel no hay más, América Latina es su patio trasero, el lugar donde ninguna otra potencia puede intentar entrometerse (como lo intentó la URSS o ahora lo intenta China), pero antes que occidentales somos latinos.
Es muy deplorable ver como parece no haber margen para pensar una Argentina en particular y una América Latina en general con autonomía y voz propia, es simplemente una discusión para argumentar si debemos subordinarnos a los "buenos" o subordinarnos a los "malos" nada más.
Es un panorama más que desalentador para aquellos que aspiramos a una Argentina y una América Latina con peso y voz propia en el mundo y no subordinadas a los intereses de tal o cual potencia sea cual sea esta.
También es triste ver como muchos sin saberlo replican y justifican el actual orden internacional en donde hay un grupo de potencias que literalmente obran como quieren en defensa de sus intereses y luego un gran numero de países de segundo orden que parecen ser los únicos obligados a respetar la paz y cumplir con el derecho internacional.
Esperemos que la decisión sobre la incorporación de el nuevo avión de combate para la Fuerza Aérea se tome priorizando los intereses políticos, estratégicos y militares de la Argentina y no los de alguna potencia (sea cual fuere esta) aunque lamentablemente es muy probable que no sea así. -
Si muy bueno osky1963 el artículo que has compartido. Todas las reflexiones son muy coherentes y dejan al descubierto nuestra realidad.
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@fenix dijo en El JF-17 el candidato que ofrece China para sustituir los Mirages en Argentina:
Si muy bueno osky1963 el artículo que has compartido. Todas las reflexiones son muy coherentes y dejan al descubierto nuestra realidad.
Asi me pareció. Y creo que no hay nada para agregar.
O se trae el SdeA del JF17 con todo lo que corresponde o afirmamos nuestra dependencia colonial a occidente a cambio de nada -
Vengo del año 2023, se elige el jf-17 y se deja la aprobación para el proximo año. Luego asume cambiemos y lo veta!.
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@tuco seguro si se bajan la bombacha con los EEUU¡ no los ves todos los 4 de julio en la embajada americana¡ jajajaja
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@tuco si llega a pasar eso y teniendo el antecedente del Kfir en 2015, este gobierno será tan o más culpable que un hipotético gobierno de cambiemos. No son todos iguales, pero si pareciera que son todos cómplices.
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Que lindo seria tener $$$ para comprar Chengdu J-10 y no preocuparse por la logistica porque lo usa la PLAAF.
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Pero la PLAAF vetó el J-10 a la FAA y por eso fueron al JF-17
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BUENOS AIRES
ARGENTINAEl Presidente del Comité de Estado Mayor Conjunto de las Fuerzas Armadas de Pakistán, General Nadeem Raza, se encuentra de visita oficial en Argentina.
La CJCSC fue recibida por el Jefe del Estado Mayor Conjunto de las Fuerzas Armadas Argentinas, Teniente General Juan Martín Paleo. Se discutió la cooperación bilateral en defensa entre Argentina y Pakistán, incluida la venta de 18 aviones de combate multiusos JF-17 Thunder Block III a la Fuerza Aérea Argentina, fabricados por el Complejo Aeronáutico de Pakistán. El CJCSC también visitó el Ministerio de Defensa y se reunió con el Ministro de Defensa para discutir el acuerdo JF-17 y otras áreas de intereses mutuos de defensa y seguridad entre los dos países amigos, así como asuntos de seguridad regional.
#WhiskeyPapa
#TeamPakistanStrategicForum