Una tormenta golpista se lleva por delante media África
La oleada golpista que se extiende por media África y de la que Europa es en gran parte cómplice por ayudar y proteger a oligarcas locales junto a gobiernos corruptos, en la mayoría de los casos protegidos por fuerzas militares europeas y de la ONU, que servían de marco legal al espolio y la miseria de varios países.
alt text
Y de golpe se vino la noche para muchos países del centro de Africa, una seguidilla de “explosiones” viene haciendo saltar por los aires a varios gobiernos de la región…¿coincidencia, contagio, o motivos que la prensa del mundo escondía con graves situaciones que desconocíamos.
Una cadena de sucesivos golpes recorre el continente africano sin mucha explicación para muchos de los que vivimos lejos y tiene muy poca explicación de acuerdo a las noticias que nos estaban llegando desde allí malestar que recorre todo el continente africano, con el Sahel y África Occidental como epicentros de esa inestabilidad, precisamente allí donde se origina el mayor volumen de emigración ilegal hacia Europa.
Y ahora le tocó al gobierno en Gabón, esta semana, pero la avalancha de revueltas civiles asociadas a golpes militares en África en lo que va del año ya no es casualidad…Las rebeliones militares de Gabon de estos días, están precedidas por las de sus vecinos Burkina Faso, Mali, Guinea Conakry y Níger…Todas con un común denominador, la presencia de tropas francesas y de la ONU durante todos estos años en esos países, que hipotéticamente estaban allí para garantizar la paz, la ley y el orden, pero que en la realidad solo sirvieron para proteger a gobiernos déspotas y corruptos, en muchos casos sanguinarios sin un freno a la miseria y el vaciamiento, producto del cual se han hecho un gran negocio a la sombra la huida silenciosa de parte de esa población hacia otros lugares y la formación de verdaderos carteles mafiosos dedicados a la inmigración ilegal…Y eso Europa lo sabía y lo escondia…
En lo que va de estos últimos 50 años mas de la mitad de ese tiempo hubo en esos países presencia militar europea, en especial Francia.
El caos de la pandemia del Covid-19, la recesión económica en la rica Europa, la caída del empleo y la producción, el cierre de muchas empresas, han cambiado las reglas de juego en Europa y Occidente. 5 años después del Covid, seguida del encarecimiento brutal del costo de vida en Europa, han hecho ver a muchos gobiernos de la Unión Europea, que el “negocio de África” ya no era “tan rentable” como hace una década atrás… Y si los empresarios europeos se van de África , ¿qué pintan sus tropas allí…??
Francia en primer lugar, fue la primera en “levantar el rancho” de allí y sacar sus tropas y aviones. Y sin la protección de los “padrinos europeos” los déspotas titeres africanos, por si solos no se podían sostener…¿el resultado?... en los últimos 4 años, diez golpes de estado con éxito desde 2019. Sin embargo en Europa y Occidente, se miraba para otro lado y los titulares de los periódicos dedicaban sus “páginas a otras cosas”…
Europa y EE.UU decididamente ignoraron sus causas y sus efectos despreciados…Estan seguros que con el envío de un “par de batallones” las cosas volverían a su lugar…Pero estalló una guerra en Ucrania y entonces las preocupaciones de los gobiernos europeos perdieron el interés en estas revueltas, sin calibrar el peligro real que la desestabilización africana supone especialmente para Europa, región de la que se nutre en especial su economía.
La culpa la tiene Putin…
Cuando en el 2019 empezaron las asonadas militares contra gobiernos déspotas anclados en el poder por décadas y protegidos de la UE, en su gran mayoría gobiernos déspotas, corruptos y autoritarios, pero disfrazados de democráticos y que eran "amigos" de Europa, estas pseudodemocracias, sin la protección necesaria de tropas europeas cayeron como torres de naipes y barquitos de papel y fueron sustituidas por juntas militares con un rasgo común: las revueltas evidenciaban el fracaso de los programas de gobernabilidad y cooperación lanzados en la región desde la Unión Europea.
alt text
La complicidad europea
La estrategia europea simplemente venía a perpetuar la injerencia de los antiguos países colonizadores, para controlar el trasiego de recursos mineros claves mediante el apoyo a gobiernos despóticos y saqueadores de los propias riquezas y con el único objetivo de mantenerse en el poder.
El último golpe de estado ha sido en Gabón esta semana, pero la avalancha de asonadas militares en África en lo que va de siglo, y que se ha acelerado en los últimos años, ha impactado también en la República Centroafricana, Guinea Bisau, Madagascar, Mauritania, Mali, Chad, Guinea Conakry, Burkina Faso, Sudán, Níger y Zimbabue. Y en algunos de estos países varias veces.
Una cadena de malestar que recorre todo el continente africano, con el Sahel y África Occidental como epicentros de esa inestabilidad, precisamente allí donde se origina el mayor volumen de emigración ilegal hacia Europa.
Cinco de las rebeliones –Mali, Guinea Conakry, Burkina Faso, Níger y ahora Gabón- han tenido lugar en los últimos dos años, diez golpes con éxito desde 2019. Sus efectos siempre habían sido despreciados y desde que estalló la guerra de Ucrania se perdió aun más el interés en estas revueltas, sin calibrar el peligro real que la desestabilización africana supone para el resto del planeta y especialmente para Europa.
Gaboneses celebran el golpe de Estado portando banderas nacionales de Gabón, en Libreville, a 30 de agosto de 2023.
La principal coalición opositora de Gabón pide a los golpistas que dialoguen con ellos
Sin embargo, el golpe de estado en Níger, el pasado 26 de julio, y los rumores sobre el papel que pudo haber tenido Rusia en esta insurrección que defenestró al presidente Mohamed Bazoum, recuperó el foco de atención europeo. De pronto, el juego de fichas de dominó que había ido derribando gobiernos por todo el continente africano era evidente e inquietante.
alt text
Los déspotas aliados de Europa
Caían gobiernos que en su mayor parte tenían más de autoritarios que de democráticos y que eran "amigos" de Europa, pseudodemocracias sustituidas por dictaduras militares con un rasgo común: las revueltas evidenciaban el fracaso de los programas de gobernabilidad y cooperación lanzados en la región desde Europa.
La estrategia europea simplemente venía a perpetuar la injerencia de los antiguos países colonizadores
La estrategia europea simplemente venía a perpetuar la injerencia de los antiguos países colonizadores, para controlar el trasiego de recursos mineros claves mediante el apoyo a gobiernos despóticos y saqueadores de los propias riquezas y con el único objetivo de mantenerse en el poder.
La gente posa con soldados mientras celebran en apoyo a los golpistas en una calle de Libreville, Gabón.
El líder de la junta militar de Gabón tomará posesión como "presidente de transición" tras el golpe de Estado
Ese es el caso de Gabón, donde el golpe de estado contra el hasta ahora presidente Ali Bongo, ha sacado a la luz el descontento de más de medio siglo de dinastía política autoritaria.
Décadas de despotismo son, así, contestadas por la fuerza militar y las promesas de democratización son ensombrecidas por más despotismo, especialmente cuando las multinacionales que operan en estos países, no solo occidentales, también chinas, respaldan a la facción vencedora con suculentos sobornos a cambio de los correspondientes permisos para acceder a los recursos naturales.
alt text
Jaque mate a la presencia francesa
En parte de esos países donde se han producido los golpes de estado, la influencia postcolonial francesa ha sido cuestionada, con expulsión de embajadores o con amenazas directas a la presencia militar gala, llegada en 2014 para luchar contra el terrorismo yihadista, pero con una acusada tendencia a priorizar la defensa de los intereses empresariales y estatales franceses.
Por eso, países como Mali o Burkina Faso han optado abiertamente por dejar la lucha antiterrorista en manos de los rusos y desechar la ayuda francesa, tras más de sesenta años de presencia militar e injerencias de París desde la descolonización.
El propio presidente francés, Emmanuel Macron, advirtió hace unos días en un encuentro de diplomáticos galos sobre el "riesgo de debilitamiento de Occidente y en concreto de Europa" que puede derivarse de esta cascada de golpes militares en África. Europa mira en estos momentos hacia el este, cuando su auténtico talón de Aquiles puede estar en el sur.
En un buen número de estos países donde se ha extendido la epidemia golpista, especialmente en el Sahel, el peso de Rusia se ha convertido en pieza clave de los cambios, con los mercenarios rusos combatiendo con éxito a los grupos islamistas y con Moscú siempre dispuesto a utilizar el escenario menos esperado para presionar a Occidente.
alt text
A rio revuelto ganancia del pescador
El fracaso a la hora de derrotar al yihadismo en el norte y oeste de África por parte de los contingentes militares enviados desde Europa, especialmente desde Francia, ha llevado a muchos de los gobiernos africanos a poner sobre la mesa los ricos recursos minerales de sus países para pagar ejércitos de mercenarios, sobre todo si son originarios de países sin presencia colonial en África, como Rusia.
Por eso nunca mejor dicho el refrán del “rio revuelto” o del que “se va de Sevilla y pierde su silla”.. Y a la retirada de tropas europeas y francesas, la presencia de Rusia y China no se hizo esperar…La difusión de publicidad en contra de Europa, se ha encargado también de recordar el histórico expolio de Europa durante siglos y que gracias a la ayuda rusa, muchos procesos independentistas fueron posibles contra el imperialismo y colonialismo europeo durante la mitad del siglo XX, en la que la clave de ese final de colonialismo (Inglaterra, Alemania, Bélgica, Francia, Italia, España, Holanda) tuvo mucho que ver con las consecuencias de la IIº GM…La debilidad y el cambio de objetivos para los ricos de Europa y la ausencia de sus ejércitos, hizo posible que los líderes rebeldes locales y gracias a la extinta URSS, fogonearan los régimen coloniales desde Europa .
Ahora, el lugar de enviados “especiales” por Moscú en los años cincuenta y sesenta, lo ocupan en África contratistas militares rusos, con poca ideología de por medio, pero con los mismos intereses que en el pasado movieron al Kremlin a apoyar los movimientos independentistas africanos: buscar contrapesos al hegemonismo colonialista occidental donde sea. Claro que, si de paso, se entra en el negocio de las tierras raras, el litio, los diamantes, oro, manganeso o uranio, pues magnífico y mucho mejor para las necesitadas y boicoteadas economías del amigo Putin.
El golpe de estado de Gabón añade gasolina al polvorín africano, pero es Níger, país en el que Rusia también tiene mucho interés, como reconoció el propio Prigozhin antes de morir, donde la tensión es mayor. Francia no quiere ceder posiciones ni retirar sus 1.500 soldados allí estacionados o que sus empresas dejen de participar en la explotación de los hidrocarburos y minerales, entre ellos el uranio.
Níger es el séptimo productor del mundo de este mineral estratégico y ocupa la cuarta posición global en cuanto al tamaño de sus yacimientos. La principal mina de uranio la explota la empresa gala Orano, con participación del Estado francés.
El uranio extraído de las minas de Níger significa el 10 por ciento del empleado en las centrales nucleares francesas para producir electricidad. Níger es la joya de la corona en el Sahel pero su renta per capita en 2022 fue de 525 euros, una de las más bajas del planeta.
París no puede perder sus intereses en Níger, por eso encabeza la estrategia europea que respalda cualquier acción de la Comunidad Económica de Estados de África Occidental (CEDEAO) para recuperar "el orden constitucional" en ese país.
Los vecinos Mali y Burkina Faso, donde los Wagner se mueven a sus anchas, ya han advertido de que cualquier intervención armada de la CEDEAO en Níger llevará a una respuesta bélica de sus juntas militares. Antifrancesas, claro.